Vivió engañada toda su vida: pensó que era ciudadana estadounidense, ahora podría ser deportada
Durante años vivió como cualquier ciudadana estadounidense, pero legalmente nunca lo fue. Este es el caso de la mujer adoptada que no fue naturalizada.
Con la llegada de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, tener los papeles en regla se ha convertido en una prioridad para todos los inmigrantes. Bajo este contexto, se vuelve viral el caso de una mujer coreana que, tras más de 20 años viviendo como cualquier ciudadana estadounidense, descubrió que en realidad nunca lo fue.
Según reveló la mujer de manera anónima para NPR, durante años actuó con total normalidad. Logró tramitar su licencia de conducir, acudir a la universidad y pagar impuestos. Todo sin ningún problema y en aparente regla, sin embargo, al intentar tramitar su pasaporte se dio cuenta que había vivido engañada toda su vida.
Pensó que era ciudadana estadounidense, ahora podría ser deportada
La mujer, originaria de Corea del Sur, llegó a Estados Unidos a los tres años de edad. En aquel entonces, fue adoptada por una familia estadounidense y creció como una americana más. Alrededor de sus 20 años, recibió una carta del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) en la que se le pedía que demostrara su ciudadanía.
Al no saber qué hacer, ignoró el aviso y sólo se limitó a consultar la situación con sus padres, quienes le aseguraron que todo estaba en orden, dado que había sido adoptada por una familia estadounidense. No obstante, años después su realidad cambió.
Al intentar tramitar su pasaporte, la mujer se dio cuenta de que no contaba con los documentos necesarios para respaldar su adopción, dado que sus padres nunca completaron el proceso de naturalización, por lo que, ante los ojos de la ley, nunca figuró como ciudadana estadounidense.
Actualmente, la mujer tiene más de cuarenta años y está casada con un ciudadano estadounidense, lo que le ofrece una vía legal para regularizar su estatus. Sin embargo, al no contar con los documentos que comprueban su adopción, solicitar la residencia permanente no es una opción, pues podría ponerse en riesgo de deportación y ser enviada al país en el que nació, donde no conoce ni el idioma ni a la gente.
Este es tan sólo uno de los cientos de casos de personas extranjeras que fueron adoptadas por familias estadounidenses que jamás hicieron el debido procedimiento para obtener un estatus legal.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos