Rahm no puede con Niemann, el Scheffler del LIV

Jon Rahm salvó este domingo su impecable estadística de top-10 en el LIV, que ya va por 21 en otros tantos torneos jugados, pero su casillero de victorias se mantendrá en las dos conseguidas la pasada temporada. Porque la parada de la superliga saudí en Virginia (EE UU) terminó como casi todas las que ha celebrado este año, con victoria del chileno Joaquín Niemann, que acumula cuatro en ocho eventos, seis sumando las del año pasado. Esta, abrochada con un -8 para -15 imperial en la última vuelta en el Robert Trent Jones Golf Club.

Especialmente formidable fue el tramo final del sudamericano, una auténtica carga de caballería que apareció de la nada por el flanco de un nutrido grupo que había alternado dinámicas durante la mayor parte del día. Con cuatro birdies en los cinco últimos, tras cubrir los 13 anteriores con otros cuatro, sin bogeys, se impuso por un golpe a Graeme McDowell (-5 para -14), que aspiraba a reverdecer viejos laureles, y quien había salido líder, el indio Lahiri (-3 para -14), con una capacidad para finalizar diametralmente opuesta a lo bien que viene jugando este año.

Merodearon también las primeras plazas dos ilustres en momentos completamente divergentes: en auge Bryson DeChambeau, otro que pasa apuros para rematar últimamente y se quedó corto por poco con su -6 para -13, y el denostado veterano Phil Mickelson, que dejó varias joyas marca de la casa alrededor del green y no dejó de pelear durante toda la jornada por volver a sentirse campeón a los 54 años (-6 para -13 al final).

Más lejos cerró Rahmbo, que fue de menos a más pero acabó pagando un inicio desastroso, con tres bogeys por los tres primeros hoyos. Estuvo súper entre el 4 y el 15, cuatro birdies y un eagle sin mácula alguna, pero el vagón de cabeza se le fue alejando y su bogey al 16, aunque corregido inmediatamente después, fue el último clavo en el ataúd. Tampoco metió esta vez a su Legion XIII en la pugna por el trono de equipos, que fue para los Crushers de DeChambeau en -36.

Últimos en esa clasificación, resultado que no casa con unos registros previos que la situaban como una de las estructuras más robustas, la mejor este año en Adelaida, Singapur y Hong Kong, fueron los Fireballs de Sergio García en la semana de la incorporación de Josele Ballester, que conoció de primeras la dureza del nivel profesional y acabó penúltimo con +2 para +7 unos días de muchos cambios.

El capitán, Sergio, tiró su mejor tarjeta desde el Masters de Augusta, un -7 para -2, ni más ni menos que diez birdies y solo cinco pares, que invita a pensar que puede recuperar a tiempo su causa para la Ryder. Luis Masaveu terminó con par para -3 su última aventura por ahora en el LIV, en el que pasará a ser suplente con la vuelta de David Puig, cuya baja por lesión ha suplido en esta cita, para hacer hueco a Ballester el resto del calendario.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp.

¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí