Carlos Álvarez: “Ese balón lo llevaron en volandas desde arriba”

A sus 21 años, Carlos Álvarez (Sanlúcar la Mayor, 2003) ya es inmortal en la centenaria historia del Levante. Su gol en Burgos supone algo más que un ascenso, también un salvavidas para la delicada situación económica del club y cumplir el sueño de toda una vida: jugar en Primera División. El talentoso mediapunta sevillano se ha ganado a pulso militar en una categoría a la altura de su fútbol.

Imagino que todavía sigue en una nube...

La verdad que sigo en shock. Hemos hecho un trabajo muy grande durante toda la temporada y este grupo se merecía el ascenso. Gracias a Dios hemos logrado este gran objetivo a falta de una jornada. Durante la celebración se ha visto la unión que hay entre el club y la afición.

¿Es ya consciente de todo lo que supone ese gol del ascenso en Burgos?

Yo creo que todavía no soy del todo consciente. Normalmente siempre ando buscando ese último pase, pero en cuanto recibí el balón tenía claro que iba a jugármela. El día anterior estuve hablando con mi familia y les dije que si tenía una le iba a pegar a portería. Cuando entró fui la persona más feliz del mundo.

Fue un final de película.

Yo creo que ni con un guion se hubiese dado de esa forma tan épica. El partido se acababa, todo iba cuesta arriba, y parecía que no éramos capaces ni de empatar. Ahí apareció Brugué en un momento en el que no estábamos bien y se elevó por encima de Espí, que es enorme. Ese cabezazo nos dio alas para creer. Habíamos soñado con ello y por suerte pude hacer un gran gol. La verdad que fue muy bonito.

¿Había soñado con marcar el gol del ascenso?

Yo creo que todo el mundo piensa que puede hacer ese gol. Lo importante no era quién lo metiera. La noche de antes estuve hablando con mis hermanos y los tres teníamos ese presentimiento. No sé si Dios y mi abuelo me ayudaron desde ahí arriba para darme esta oportunidad. Es el gol más importante de mi corta carrera.

Ya se habla de que puede ser el mejor gol de la historia del Levante, por la belleza del mismo y su transcendencia.

Ahora mismo quizá se habla desde la euforia. Todos los goles son importantes, no solo el del ascenso. Si no me equivoco hemos hecho 68 goles y sin ellos este no serviría de nada. Lo importante de este grupo es que nadie está por encima del equipo. Si estamos en Primera es gracias al esfuerzo de todos.

El éxtasis absoluto llegó con el pitido final.

Ese momento fue increíble. Lloré mucho. Es algo que no olvidaré nunca. En ese momento me vinieron a la cabeza las personas que ya no están, mi abuelo, al que siempre le pido ayuda, y todos los granotas que desde arriba nos echaron una mano. Estoy seguro de que ese balón lo llevaron en volandas para que pudiéramos conseguir este ansiado ascenso.

¿Cuál es el mensaje que más ilusión le ha hecho estos días?

Sin duda, el de mis padres y el de mi abuela. Siempre he tenido claro que la familia son los que siempre van a estar, en las buenas y en las malas. Qué mejor que poder dedicárselo a ellos. Son las personas más importante que tengo en mi vida. Ellos son mis ídolos.

“Los sueños se cumplen”, escribió en sus redes sociales.

Cuando somos pequeños todos soñamos con jugar en Primera. Conforme vas creciendo te vas dando cuenta de lo complicado que es llegar. La verdad que he cumplido uno de mis sueños, pero todavía me quedan más por cumplir.

Su temporada ha sido de matrícula (7 goles y 11 asistencias), llamando la atención de muchos clubes...

Ahora mismo trato de no centrarme en eso, partiendo de la base de que tengo contrato hasta 2027. Ya he dicho muchas veces que soy muy feliz aquí. Llegué al Levante con el objetivo de poder jugar en Primera y espero que podamos disfrutar todos juntos la temporada que viene.

Sobre la mesa tiene una oferta del club para ampliar su contrato dos años más.

Me hace muy feliz el notar la confianza del club hacia mí. La verdad que ha sido un sueño poder ascender con el Levante. Desde el primer día el club y la afición se han portado increíble conmigo. Espero haber devuelto con este gol toda la confianza y el cariño que depositaron en mí.

Le tendrán que ajustar el contrato acorde a la importancia que tiene en el equipo.

Yo juego al fútbol por pasión y porque es mi sueño. Trato de hablar en el verde. No me centro en eso porque lo llevan mis agentes. A partir de ahí, ya veremos qué sucederá en el futuro.

Este ascenso, además, supone un salvavidas para el club en lo económico.

La verdad que el ascenso es importante en ese aspecto. Es cierto que nosotros siempre nos hemos mantenido al margen. Nos centramos en jugar y hemos intentado ayudar al club con lo que está en nuestra mano, tratando de hacerlo lo mejor posible. Esperemos que el ascenso ayude para que sigamos creciendo.

¿Qué importancia le da a la figura de Julián Calero?

Ha sido muy importante. Nos cambió a todos la forma de pensar, incluso creo que a la afición también. Nos ha hecho pensar en positivo, centrarnos en lo que podemos manejar y su plan nos ha guiado hasta este ascenso.

Les ha exprimido en el día a día.

Calero y su cuerpo técnico nos hacen trabajar muy duro, pero está claro que nos ha dado un gran resultado. Nos han llevado al límite físicamente y ahí juegas un poquito con el riesgo. Personalmente llevaba unas semanas infiltrándome porque tenía mucho dolor en el pubis. Al final es algo que va con nuestro deporte. Con el ascenso todos los dolores se hacen mucho menores.

Calero, siempre ambicioso, les habrá dicho que ahora hay que ir a por el título...

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