Baptista, cerca del Juvenil C del Madrid
Según ha podido saber AS, ‘La Bestia’ está a punto de alistarse como nuevo técnico en La Fábrica. Cumplirá su deseo. Su perfil de gran formador y su propuesta futbolística encajan.

Soplan vientos de cambio en Valdebebas. Y en medio de ese silbido constante, un rugido. El de La Bestia. El de Julio Baptista. Porque según ha podido saber AS, está cerca de convertirse en nuevo entrenador del Juvenil C. Un movimiento próximo a salir del horno. Que llevará a Julio a coger el testigo de un Alberto Fito, cuyo futuro no está decidido, que ha ganado sobradamente la Primera División Autonómica (a falta de una jornada, 13 puntos sobre el Adarve). Pero todo apunta a que el navío cambiará de timonel. En una Fábrica de cambios. Con Raúl ya fuera y Arbeloa ascendido, la ecuación blanca apunta a otra leyenda. Se acerca el día de La Bestia.
Se trata de un perfil que hace tiempo se valora de manera positiva en los pasillos de Valdebebas. Ya apareció su nombre meses atrás. Para el Real Madrid C. En esos instantes de debate tras el despido de Álvaro Gómez-Rey, como informó AS. Había una parte de la entidad que quería contar Baptista. Gustaba y el otrora centrocampista veía con estupendos ojos aterrizar en La Fábrica. Como también gustaba otra opción, la que ganó finalmente esa batalla: Joselu Sánchez. La misión era clara: salvar al C. Y se logró. In extremis, en el playout, pero se logró tras superar al Villanovense. No fue entonces, pero sí ahora. Baptista volverá al Madrid. A un club donde marcó 13 tantos y levantó dos títulos. Donde dejó un grato recuerdo.
“Me encantaría”
Cumplirá su anhelo. Algo que no ha ocultado. Y que dejó claro en entrevista con AS el 7 de abril: “Bueno, me encantaría. Me encantaría... Al final es el Madrid. En su momento se dieron otras circunstancias. Había, digamos, overbooking. Para entrar en el Madrid, sea la categoría que sea, el entrenador tiene que estar muy preparado. Y en aquel momento estaba empezando... Ahora podría empezar aquí, sí. Creo que ese tiempo en otros sitios me ha dado unas bases, yo creo que buenas e importantes, para seguir desarrollándome. Hoy me siento mucho más seguro de llegar. Si un día me llega la oportunidad de poder trabajar aquí, que ojalá pudiera ser, que sea con una base buena". Y esa oportunidad ha llegado. Está a punto de hacerlo.
Gran formador, de propuesta arriesgada
Después de “ese tiempo en otros sitios”. En Valladolid. Donde tuvo dos etapas bien diferenciadas. En el Juvenil, donde llegó en 2019, fueron todo éxitos. Con campañas históricas. Con un fútbol alegre, propositivo. Con una querencia por el balón que le llevaba a acumular hasta a cinco hombres en área propia para iniciar el juego. Con la figura de un portero con buen pie como capital. “Se disfrutaba como nunca”, desliza una fuente consultada que vivió in situ aquella etapa. Una etapa donde apostó por la juventud al máximo. Donde moldeó a jugadores como David Torres, Chuki o Maroto, ya con experiencia en el primer equipo blanquivioleta.
Y una etapa que le abrió la puerta del Valladolid Promesas en 2021. Un caramelo envenenado que acabó en destitución en 2023. El club venía de luchar por ascender a Segunda, pero Baptista se encontró con un proyecto minimizado. Con menor presupuesto y varias trabas que le llevaron a Segunda RFEF, aunque estuvo a punto de recuperar la categoría al curso siguiente. Campañas sin tanto riesgo en la creación, pero sin dejar de lado al ataque como luz que más alumbra su fútbol.

Transcurso durante el cual, por revuelto que viniera el río, siguió apostando por perfiles con potencial. Mucho. Como Fresneda y Lucas Rosa, a quienes logró hacer coexistir y pulió tanto que se terminaron convirtiendo en dos ventas históricas en la entidad. Rosa, al Ajax por tres millones de euros hace cinco meses; Fresneda, por nueve al Sporting de Portugal en 2023. Dos éxitos con el sello de La Bestia. Ya lo resumió en su charla con este periódico: “Tengo esa capacidad de ayudar a los chicos, tener el tacto para tratar al jugador, cómo sacar el mejor rendimiento o hablar con ellos”.
Encaje en La Fábrica
Un cóctel que encaja en la idiosincrasia del Madrid. De su Fábrica. La exigencia será máxima. Siempre lo es en el club blanco. Pero lo primordial es formar. Moldear a los talentos para que, llegado el momento, puedan rendir con los mayores. Sentar las bases. Y en eso, como demostró en su paso por Valladolid, Baptista es experto. Y tratará, con su rendimiento, ir ascendiendo. Aspirar a ese tránsito que acaba de completar, por ejemplo, Arbeloa. Una Bestia andará suelta por Valdebebas.
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