Su rostro ajado por el paso del tiempo es el fiel reflejo de una intensa historia vital. Quienes le conocen afirman que hoy Danny Trejo (Los Ángeles, 1944) es una de las personas más amables y bondadosas con las que te puedes cruzar. Pero no siempre fue así. En su biografía se mezcla una temprana adcción a la heroína en la adolescencia con las recurrentes visitas al sistema penitenciario californiano durante más de una década. Un panorama nada halagüeño que no presagiaba nada bueno.

El boxeo fue durante sus años entre rejas una forma de evasión, especialmente en su periplo de 11 años en la Prisión Estatal de San Quintín, donde consiguió ser campeón estatal en las categorías de peso ligero y peso wélter, y donde logró quizá su victoria más importante ya que consiguió rehabilitarse y darle un giro (y sentido) a su vida. “Me hice una promesa a mi mismo: tratar de hacer algo bueno por los demás”, asegura el actor de origen mexicano en el trailer de ‘INMATE #1: The Rise of Danny Trejo’, un documental biográfico que verá la luz este mismo año.

Y así fue, el actor en ciernes compaginó varios trabajos -y alguna que otra pelea remunerada en clubes de lucha- tras abandonar la cárcel con una labor solidaria como consejero, también denominado padrino, de personas qie intentaban superar su adicción a las drogas o al alcohol y que todavía realiza en la actulidad. “Todo lo bueno que me ha pasado en la vida ha sido como consecuencia de ayudar a alguien más”, asegura Trejo, que precisamente dio el salto a la gran pantalla por casualidad en 1985 cuando se presentó en el plató de rodaje de 'Runaway Train' (1985) para asesorar a uno de los actores, Eric Roberts, en temas pugilísticos. Y salió de allí con su primer papel bajo el brazo tras encandilar al directcor de la cinta, Andrei Konchalovsky. Y el resto es historia.

‘Desperado’ (1995), ‘Heat’ (1995), ‘Abierto hasta el amanecer’ (1996), ‘Con Air’ (1997), ‘xXx’ (2003) o la icónica ‘Machete’ (2010) son algunos títulos que salpican la prolífica carrera de Danny Trejo en lo que a la gran pantalla se refiere. Porque también ha aparecido en series de culto como ‘Breaking Bad’ o ‘Sons of Anarchy’. Ahí es nada.

La comida como epicentro de su vida actual c4l29

Pero lejos de las cámaras el actor también ha cultivado su pasión por la cocina ya que es el propietario de una cadena de restaurantes, Trejo’s Tacos, donde da trabajo a jóvenes que como él han atravesado dificultades, tiene su propia marca de cerveza mexicana y ha publicado un libro con decenas de recetas mexicanas que incluyen propuestas sin gluten, vegetarianas o veganas. Y es que Danny Trejo es un apasionado de la comida saludable.

“Por la mañana, suelo tomar un desayuno completo pero saludable. Por lo general, se compone de huevos revueltos con tocino de pavo. Es con soja, por lo que no es graso. Todo aderezado con pimientos, cebollas, espinacas y queso feta. No tomo comida rápida, aunque reconozco que mi plato favorito son los nachos de carne asada con dos huevos encima. Una cena que me encanta es un par de pechugas de pollo con ajo, arroz y verduras. No diría que soy un fanático de la salud, pero siempre he tratado de cuidarme”, asegura el actor en una entrevista con GQ, que también ha sacado tiempo durante la pandemia provocada por el SARS-CoV-2, para ofrecer comida a los más desfavorecidos o en entornos sociosanitarios.

Rutina de entrenamiento de Danny Trejo 2z3737

¿Y como se mantiene en forma a sus 76 años? Pues reconoce que ya no entrena como antes, lo que no significa que se haya abandonado. Ni mucho menos. “Hace unos cinco años, mucha gente comenzó a reconocerme, y fue muy difícil ir al gimnasio. Así que monté un pequeño gimnasio en mi casa. Tengo una cinta de correr, una bicicleta y un set de pesas completo. También tengo un banco para press de banca y todo el tiempo del mundo en este momento, así que suelo hacer ejercicios de pectorales por la mañana, y brazos por la tarde. Al día siguiente entreno el tren inferior y la espalda. Voy alternando”, explica Trejo que sin embargo ha reducido la intensidad de sus entrenamientos.

“El ejercicio es necesario, pero ya no es obligatorio. Estoy en muy buena forma, pero a mis años es díficil conseguir abdominales así que solo trato de mantenerme en un peso saludable. Quizá caminar es lo más importante para mi. Tengo cinco perros, y los paseo cada uno durante 20 minutos para que hagan un poco de ejercicio”, añade.

Y si alguien se pregunta si Danny Trejo todavía boxea, el actor lo deja claro “No. Dios mío, tengo 76 años, lo último que quiero es recibir un puñetazo en la cara. Todavía golpeo el saco y salto a la comba, pero ya no entreno. Hay un par de personas que querían que las entrenara, pero no tengo esa clase de tiempo. Ser entrenador es toda una carrera. De lo contrario, solo estás perdiendo el tiempo de tu boxeador. Apadrino a una boxeadora. Se llama Seniesa Estrada, es increible y ganó el Campeonato Mundial de WBC. Tiene un récord de 19-0 en este momento. Estoy realmente orgulloso de ella”, concluye Trejo, un tipo (no tan) duro.