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Eva Longoria prueba uno de los jamones más caros del mundo y no sabe qué cara poner: “Voy a llorar”

Dentro de su serie ‘Eva Longoria: En busca de España’, la actriz ha estado en Andalucía catando un jamón de bellota, cuya pieza podría rondar los 4.000 euros.

Eva Longoria posa en la alfombra roja.
Marta Rodríguez Peleteiro
Su trayectoria en Prisa comenzó en AS, en 2006, en la sección de Cierre. Posteriormente asumió la coordinación de la revista AS Color y la redacción de los blogs Match Point y Erratas de Campo. En 2017 pasó a formar parte de PrisaNoticias, en el control de producción de El País y AS, y volvió a AS a finales de 2022, como redactora de Tikitakas.
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El jamón es, sin lugar a duda, uno de los productos más emblemáticos y apreciados de la gastronomía española. Entre los muchos tipos que existen, el jamón ibérico ocupa una posición privilegiada, una verdadera joya culinaria cuyas piezas pueden rondar los 4.000 euros.

Este jamón es reconocido por su sabor exquisito, su textura inconfundible y la dedicación con la que se elabora. Huelva es una de sus principales cunas. Aquí se crían cerdos ibéricos 100% puros que viven en libertad y se alimentan principalmente de bellotas durante la última fase de su vida.

Este proceso de crianza es crucial para obtener un jamón de calidad superior, ya que la dieta de bellotas, rica en ácidos grasos monoinsaturados, le otorga al jamón su sabor inconfundible y su textura delicada. De ahí que no sea de extrañar la reacción de la actriz Eva Longoria al probar unas lascas de un jamón de bellota durante la grabación en Andalucía de su programa Eva Longoria: En busca de España: “Voy a llorar”, decía la intérprete tras llevarse un fragmento a la boca.

Las bondades nutricionales del jamón ibérico

El jamón ibérico no solo es un manjar para el paladar, sino que también ofrece una serie de beneficios nutricionales. Estos son algunos de los aspectos más destacados:

  • Alto contenido de proteínas de alta calidad. El jamón ibérico es una excelente fuente de proteínas, esenciales para la reparación y el crecimiento de los tejidos corporales. Las proteínas del jamón ibérico son de alto valor biológico, lo que significa que contienen todos los aminoácidos esenciales que el cuerpo necesita.
  • Grasas saludables. Aunque el jamón tiene un contenido graso relativamente alto, la mayoría de estas grasas son monoinsaturadas, especialmente el ácido oleico, el mismo tipo de grasa que se encuentra en el aceite de oliva. Estas grasas son beneficiosas para la salud cardiovascular, ya que ayudan a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y aumentan el colesterol bueno (HDL), contribuyendo a la protección del corazón.
  • Rico en minerales. El jamón ibérico de bellota es una excelente fuente de minerales como el hierro, el zinc, el magnesio y el fósforo. El hierro presente en el jamón es de tipo hemo, que se absorbe mejor que el hierro no hemo presente en alimentos vegetales. Esto lo convierte en un alimento ideal para prevenir deficiencias de hierro, especialmente en personas con necesidades aumentadas de este mineral, como mujeres embarazadas o personas con anemia.
  • Vitaminas del grupo B. El jamón ibérico es una rica fuente de vitaminas del complejo B, como la B1 (tiamina), B6 (piridoxina) y B12 (cobalamina). Estas vitaminas son esenciales para el funcionamiento adecuado del sistema nervioso, la producción de energía y la formación de glóbulos rojos.
  • Poco procesado. A diferencia de otros embutidos, el jamón ibérico de Cinco Jotas es un producto relativamente poco procesado. La curación lenta y natural, que puede durar varios años, permite que el jamón conserve la mayor parte de sus propiedades nutricionales y de sabor, sin la necesidad de aditivos o conservantes artificiales.

El consumo moderado de jamón ibérico de alta calidad puede contribuir a una dieta equilibrada que favorezca la salud del corazón, siempre que se acompañe de una alimentación variada y un estilo de vida saludable.

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Algunos expertos en nutrición han comenzado a considerar el jamón ibérico como un superalimento debido a su rica combinación de nutrientes esenciales. Gracias a su alto contenido de grasas saludables, proteínas, minerales y vitaminas, el jamón ibérico es un alimento que no solo es delicioso, sino también nutritivo. Su consumo, en cantidades razonables, puede ser una excelente manera de incorporar nutrientes valiosos a nuestra dieta sin renunciar al placer de un buen manjar.

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