Preocupación por el estado de salud de Ernesto de Hannover: el ex de Carolina de Mónaco, hospitalizado
Su novia, Claudia Stilianopoulos, su hijo Christian y la mujer de este, Sassa de Osma, no se separan de él, ingresado en la clínica Ruber de Madrid.
Máxima preocupación por el estado de salud del polémico aristócrata Ernesto de Hannover, jefe de la antigua Casa Real de Hannover y de la antigua Casa Ducal de Brunswick, y más conocido en nuestro país si cabe por ser la expareja de la famosísima Carolina de Mónaco, con quien nunca llegó a divorciarse y a la que dejó desfilar sola por el pasillo de las autoridades durante en la boda de Felipe VI y Letizia, pese a haber viajado para acompañarla en el evento (se especuló con que la noche anterior había sido larga para él).
Ernesto de Hannover se encuentra ahora ingresado en la clínica Ruber Internacional de Madrid, aunque se desconocen los motivos que han llevado a su hospitalización. No obstante, las caras de sus seres queridos, quienes no se separan de él, denotan preocupación en su gestos.
Por las afueras del hospital se ha podido ver estos días, tras ser ingresado el jueves de madrugada, a su núcleo más cercano en la capital de España: su novia, Claudia Stilianopoulos, hija de la ya fallecida Pitita Ridruejo, a su hijo Christian (el mediano de los tres que tiene: con el primogénito la relación no es buena y cuenta, además, con otra hija fruto de su relación con Carolina de Mónaco), y la esposa de este y nuera de Hannover, Sassa de Osma.
Problemas de salud
A sus 71 años, Ernesto de Hannover no puede presumir de gozar de un buen estado de salud. El bisnieto del emperador alemán Guillermo II tuvo que ser intervenido hace unos meses por problemas en la cadera, una operación que la habría llevado a necesitar un andador para poder caminar. Sin embargo, hace unos días apareció ya más recuperado durante la celebración del cumpleaños de su nuera Sassa de Osma.
A quienes de momento no se ha visto por Madrid ha sido a su hija pequeña, Alexandra, y a su primogénito, con el que mantiene una amarga relación, ya que le acuse malvender el patrimonio familiar. Detrás de este enfrentamiento podría estar la razón por la que Carolina de Mónaco no se divorcia del aristócrata. Mientras algunos apuntan a que es una forma de no perder su tratamiento de alteza real, otros hacen alusión a que dentro de la buena relación de esta con sus hijastros, fruto del primer matrimonio de Ernesto de Hannover, con la rica suiza Chantal Hochuli, les protege así de un nuevo matrimonio de su padre, que podría afectar a su herencia.
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