Cascarrabias Djokovic
El serbio pasa a semifinales el día de su 38 cumpleaños tras reventar una raqueta, llevarse un susto en la rodilla y dar sensación de enfado constante. Pidió perdón al público por “no ser un buen ejemplo”
Sonrisa al recibir la tarta de su 38 cumpleaños tras derrotar al italiano Matteo Arnaldi (6-4 y 6-4) y pasar a semifinales del ATP 250 de Ginebra. Pero esa curvatura de sus labios fue el primer esbozo de felicidad en los 98 minutos que duró el partido. El serbio, que ayer ganaba su primer partido de 2025 en arcilla ante el húngaro Fucsovic, se mostró muy tenso en el partido. Y eso que dominó el primer set casi desde el inicio tras romper el servicio del transalpino, su verdugo en el Masters 1.000 de Madrid, en el tercer juego del encuentro. No concedió ninguna oportunidad de quiebre con un saque que le permitió ganar 21 de los 34 puntos que puso en juego y primera manga a la mochila.
El segundo set comenzó más igualado con un paso adelante de Arnaldi, pero Nole seguí sin sufrir en su turno... hasta que en el cuarto juego varios errores propios hicieron que el italiano le quebrara. La reacción de Djokovic fue furibunda estrellando con toda la violencia que le permitió su brazo derecho la raqueta contra el suelo. Arnaldi miraba casi asustado y aprovechó para ponerse 4-1 arriba con un doble contrapie que hizo saltar todas las alarmas del tenis mundial, ya que la rodilla izquierda de Novak parecía quedarse enganchada en la arena suiza. Novak hizo varios movimientos con la cara, se sentó en la silla mirando su articulación y empezó a hacer gestos extraños con las manos mirando a su nuevo grupo de trabajo.
RESURGIÓ EN EL PEOR MOMENTO.
Sin embargo, cuando todo parecía complicarse más y los espectadores llevaban al límite las cremalleras de la ropa de más abrigo que portaban... Djokovic resurgió para sumar cinco juegos seguidos y cerrar el encuentro. Ahí toda la presión pareció desaparecer de su rostro de repente. “Con este frío no ha sido fácil. Y quiero pedir perdón al público por romper la raqueta. No es un buen ejemplo, pero son momentos de mucha tensión. “Espero jugar un buen tenis en semifinales y tener un buen balance mental”, decía al micrófono del torneo. En esa fase le espera el ganador del Norrie-Popyrin (viernes 15:30), el penúltimo rival que puede impedir el título 100ª del GOAT.
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