El chollo de Caro
El meta del Cádiz podrá mostrar su valía bajo palos con la lesión de David Gil. Tiene contrato hasta 2026, pero apunta a salir en verano. Una oportunidad para reivindicarse.


Con la salvación casi en el bolsillo (al Cádiz solo descendería con una carambola rocambolesca) los amarillos afrontan el tramo final de la temporada sin apenas alicientes. No es nada descartable que Garitano dé minutos a los jugadores menos habituales en los tres últimos partidos. El que estará seguro bajo palos, debido a la lesión de David Gil, es Caro. El meta tendrá una oportunidad de demostrar su valía en un año para el olvido en lo deportivo.
La titularidad incuestionable de David Gil ha llevado a Caro a jugar muy poco esta temporada. El meta onubense, aunque comenzó el curso en el once, se ha tenido que conformar con partidos sueltos. En la primera fase de la temporada solo disputó dos partidos de Liga y otros dos de Copa. Tanto es así que desde diciembre no tenía minutos. A raíz de la lesión de David Gil hace dos jornadas, cogió el testigo, con poco acierto ante el Córdoba y una decente actuación ante el Almería.
El futuro de Caro está en el aire. El meta tiene contrato con el Cádiz hasta 2026, pero todo apunta a que saldrá del equipo amarillo. En el club creen que pueden hacer algo de caja con su salida, aunque su rendimiento no ha sido el esperado. La semana que viene el representante de Caro se reunirá con Cala y Vizcaíno para tratar el futuro del meta.
Es por ello que Caro está ante su gran oportunidad en los tres partidos que faltan para que finalice la Liga. El meta llegó a Cádiz con un gran cartel, tras su sobresaliente última temporada en el Burgos, en la que consiguió batir el récord de imbatibilidad que ostentaba Abel Resino hasta la fecha. El onubense estuvo 1.293 minutos sin encajar un gol. Es por ello que el Cádiz puso sus ojos en el meta el pasado verano. La salida de Ledesma llevaba al mercado a los amarillos, que veían en Caro un sustituto de garantías para lograr volver a Primera.
Sin embargo, tras un mal encuentro ante el Zaragoza en la primera jornada liguera, en un partido en el que estuvo señalado tras estar ‘en la foto’ en tres de los cuatro goles que encajaron los amarillos, fue relegado al banquillo. No volvió a jugar hasta la jornada 11, en el partido que enfrentó al Cádiz con el Eibar. Los armeros se llevaron el encuentro por la mínima, con otro gol en el que Caro pudo haber hecho mucho más. Desde ahí solo jugó en Copa hasta los dos últimos encuentros. Ahora, de cara a los tres últimos partidos, Caro tiene la oportunidad de resarcirse bajo palos.
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