El Atlético juega a los lomos de De Paul
El resultado preocupa más por los números de cara a la clasificación liguera que en lo referente a las sensaciones que transmitió el equipo rojiblanco.
Visto lo acontecido en los 93 minutos ante el Villarreal, pocos reproches habrán salido de la boca de Simeone. El técnico argentino, que tras el desgaste físico y emocional del día de Champions apostó por unas lógicas rotaciones, vio cómo un error imprudente (Reinildo, hay que trabajar el evitar riesgos dentro del área) ponía por delante a un Villarreal que copiaba la estrategia del Cholo durante años. Fue una pena irse al descanso con 0-1 cuando los rojiblancos fueron los únicos que opositaron a la victoria. Siguió la segunda parte con los mismos tics, atrevimiento y fútbol ofensivo rojiblanco, y agazapados a expensas de zarpazo de los visitantes.
A pesar de los cambios de unos y otros, la tónica fue igual. Fruto de ello, esta vez sí, el gol llegó para los del Cholo. Tras una nueva jugada elaborada, Lino ponía el empate a 1-1 que tanto habían buscado los rojiblancos durante todo el encuentro. Me gustaría resaltar en este corto empate a un gol, después de los riesgos de unos y otros, la aportación del incansable Julián, y también la De Paul, jugador de quien, tras meses de incansable trabajo, podemos decir que este Atlético de Madrid juega a lomos del fútbol que tiene en sus botas el argentino. Pudimos ver más un partido que preocupa más en lo que se refiere a los números (de cara a la clasificación liguera), que en lo referente a las sensaciones que transmite el equipo. No voy hablar de meritocracia, porque si no aprovechas tus ocasiones y no eres contundente, te merecerás el resultado final, pero si analizamos la propuesta y los riesgos de los dos equipos, los rojiblancos apostaron más fichas a la victoria que los amarillos. Espera el Salzburgo en Champions.
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