Dembélé, cifras de locura

La Champions League es la competición en la que los grandes jugadores se convierten en estrellas, en la que los mortales se transforman en mitos, en la que un delantero, simplemente por un gol, pasa de villano a héroe. Y también es el torneo en el que Ousmane Dembélé debe ratificar que es el mejor artillero del 2025. El PSG confía en la remontada en Anfield contra el Liverpool y supedita muchas de sus opciones al potencial del francés, el futbolista más determinante del año, 20 goles entre todas las competiciones, pero insuficiente en el primer envite disputado en París el pasado miércoles.

El exjugador del Barcelona ha registrado cifras récord, atraviesa un momento de forma inédito antes en su carrera y su nivel ha sido incontestable desde el 1 de enero. Sin embargo, en el momento de la verdad, en la Champions League, el tormento del PSG durante más de una década, fue incapaz de desarbolar a un Liverpool que agonizó durante 90 minutos hasta encontrar su premio al final por medio de Elliott.

Con su doblete contra el Rennes, en un encuentro en el que fue suplente e ingresó al terreno de juego en el minuto 64, Dembélé alcanzó las 20 dianas en 2025. Su récord de goles en un año era de 15, trasluciendo que su metamorfosis, impulsada por Luis Enrique, centrando su posición en el campo, es total. La Champions, que no espera a nadie, un torneo cruel porque dos partidos son suficientes para empañar una gran temporada, será concluyente en los análisis de final de curso para determinar si el año del francés ha sido bueno o sobresaliente.

Con 28 goles en 35 partidos, las cifras más prolíficas de su carrera, Dembélé intentará acercar al PSG a la remontada como ya lo hiciera hace un año, en abril, en la vuelta de los cuartos de final de la Champions contra el Barcelona. El Mosquito marcó en el partido de ida y repitió en Montjuic, rubricando el gol del empate que catapultó a los de Luis Enrique para certificar su clasificación a las semifinales. En París no albergan ningún genero de duda respecto a su talento y compromiso, a pesar de haber recibido críticas en Francia por su prestación en el encuentro de ida frente al Liverpool.

Dembélé es el jugador que encarna a la perfección el tropel goleador en el que se ha convertido el PSG, promediando prácticamente tres goles por encuentro desde que comenzó el año. A pesar de un inicio insípido de temporada, con una ‘bronca’ incluida con Luis Enrique, desembocando en su desconvocatoria a comienzos de octubre antes de viajar a Londres para enfrentarse al Arsenal, el internacional francés se ha liberado por completo y es una amenaza total para todos los rivales que osan a intentar atenazar al conjunto parisino. Su doblete contra el Rennes le desquitó, después de una actuación ante el Liverpool en la que fue de más a menos.

Dembélé está motivado, se siente imparable en el campo y en París lo celebran. Si el canterano del Rennes marca dos goles más en lo que resta de temporada, se llevará como premio un reloj de lujo, un Rolex, financiado por sus compañeros y amigos más cercanos. Anfield, uno de los estadios más difíciles del fútbol europeo, dictará sentencia. Poco importará el ciclópeo nivel que ha manifestado en los últimos dos meses si el delantero no consigue dar un paso al frente y asumir las riendas de un PSG que se siente, ahora mismo, más que capacitado para darle la vuelta a la eliminatoria. Una final para todos, pero sobre todo para ‘Ous’, en uno de los partidos más importantes de su carrera.

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